martes, 20 de marzo de 2012

historiografía del agua.


I wanted to be instead of the water.
(Miranda July)

(Para Annie.)

Esperar en el viaje: la espera en movimiento. Define deseo. Define definición. Escribe todo seguido, sin ningún espacio entre aquí y el movimiento. Ahora que llega la luz. Ahora que llega la noche y las fiestas donde todos se disfrazan, y nadie recuerda tu nombre. Su nombre. Nadie. Escribir y no estar. Tan dormida, la arena, creo. Yo quería ser en vez del agua, digo. Por eso vine a este país acuático, a este país sumergido. Esto es Europa, decimos, sin creerlo demasiado. Y cada uno lleva su historia que no comparte, su historia que se desdibuja, la historia para la que no tenemos nombre, porque ya nos lo dio a nosotros. La historia, dicen, a la que pertenezco. La que encontramos.

7 comentarios:

  1. La historia, dicen, la escriben los supervivientes. Así pues, ¿debemos fiarnos?

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  2. La foto, y el texto, me han despertado (de forma tangencial) un triste recuerdo: mi padre era un hombre muy serio y reservado, siempre estaba sumergido en su trabajo y hasta que no llegó a la vejez (ya no está) no se abrió demasiado ni a mí, ni a mis hermanas.

    Pero, sin embargo, tenía una costumbre; una rareza que, a mis ojos de niño, no tenía ningún significado:

    Él dibujaba sus sueños en la arena; así lo hizo muchos domingos, en las playas de Santander, o de Laredo, con todos sus proyectos vitales; era algo así como si le contara a la arena lo que iba a hacer.

    Al leerte no he podido dilucidar si mi padre quería ser arena en vez de agua o lo que deseaba era la libertad de la mar.

    Me has hecho pensar en él, y en mi niñez, y me ha gustado.

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  3. Eso es muy bello. Gracias por compartirlo.

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